Es difícil mejorar una obra casi perfecta como 'Memento mori'. César Pérez Gellida lo ha logrado en 'Dies irae', la segunda parte de la saga 'Millennium', versión española. Espero que la tercera 'Consummatum est' aún sea más vibrante, impactante, emocionante, flipante...
'Dies irae' es una continuación del juego de ajedrez negro entre el inspector quemado, traumatizado y violento de Valladolid, el psicólogo loco especialista en asesinos en serie, su hija pirada, el 'killer serie' nacido en Castilla León... y, en este caso, los excriminales de la Guerra de los Balcanes, perseguidos por el Tribunal Internacional.
Además de la poderosa e intrincada trama -que te obliga a devorar el libro para llegar hasta el ansioso y ansiado final-, Pérez Gellida es un experto en ambientaciones. Geniales y perfectas las recreaciones de Trieste y Belgrado. Se sale.
'Carapocha', el psicólogo ruso, hijo de español y rusa, está en el culmen de su creatividad y combatividad. El autor eligió el careto de Steve Buscemi para darle realismo. El inspector Ramiro Sancho es el apocalipsis (los mafiosos albaneses que le persiguen son de antología). La inspectora italiana, un hallazgo perfecto. El criminal es un American Psycho amante del Ribera de Duero y de Bunbury.... La reostia. ¡Un cóctel más que molotov!
La banda sonora que acompaña toda la historia es de órdago. Un disfrute completo. Un placer continuo. El arranque de la novela, de los más brutales que leí jamás. Pura novela negra, psicológica, sin concesiones.
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