Todo en ella rezuma genialidad. Desde los personajes hasta los paisajes y, por supuesto, una trama estratosférica, muy trabajada y cargada de suspense, intenso, intensísimo.
Este libro contiene retazos de Agatha Christie y sus 'Diez negritos' y de la brutal película de Leonardo di Caprio 'Shutter Island'.
La tranquila vida de una ornitóloga, en una isla privada del Cantábrico, donde su mejor amiga dirige un peculiar hotel, se transformará 360º con el descubrimiento de una terrible verdad, oculta y criminal.
Veinte años después, un heterogéneo grupo de personas serán citadas para desvelar la realidad, dura, violenta, sucia y sangrienta.
Por si fuera poco, la agente de la Policía Nacional Laura Lebrel asiste a su boda, entre estrafalaria y descocada, con un humor ácido y surrealista, y una luna de miel a lo 'Cluedo'.
En el aire, la difícil investigación de una agente de la Científica sobre de hechos acaecidos 1974, y protagonizados por el Flautista, un asesino en serie de niños que jamás fue capturado, pero que las cloacas del Estado quieren tapar a toda costa.
Bufff... este libro es canela en rama, canela fina y oro en polvo. ¡Cómo la he disfrutado' ¡Pedazo de joya del género negro!
